El Ocaso de un Establo de Excelencia

Año 2025.

El Declive de un Establo Lechero modelo en Arequipa

Caminaba distraído por los alrededores de la siempre cálida plaza de armas de Arequipa, cuando me encontré frente a frente con Oscar, un muy antiguo compañero de trabajo del establo Vitor con el que compartimos muchas buenas horas de labores pecuarias.

El casual reencuentro fue realmente una grata sorpresa y nos estrechamos en un fuerte, sincero y prolongado abrazo, no era para menos y acordamos en esos momentos ir a una cafetería ubicada a unos cuantos pasos en la acera lateral de la plaza para conversar sobre nuestras vidas.

-Oscar, le dije, son horas de trabajo, eran las 11 am., ¿qué haces por aquí? ¿en alguna comisión?

-No ingeniero, me respondió con voz un tanto baja, ya no trabajo en el establo, afirmó en tono triste con la mirada fija en el refresco que tenía al frente.

– ¿Qué? ¿qué pasó? ¿te robaste alguna vaca?, le pregunté asombrado y en tono de broma.

El Colapso de la Productividad Lechera de un Establo de Élite

Oscar era relativamente joven, quizá contaba con alrededor de 40 años, pero antiguo en el trabajo pues desde los 20 años había trabajado para el establo.  Esa experiencia acumulada lo hacía un trabajador muy valioso para la empresa y, además, sobre todo, era honesto.

-Ya el establo no es lo que antes era, me dijo.

Prosiguió, luego de un sorbo de su refresco, con un tono de amargura:

Recuerda ingeniero cuando hace como 20 años, por el año 2007, hablábamos orgullosos que estábamos en el mejor establo del país porque nuestras vacas batían los récords de producción de aquella época. En aquellos tiempos, tener promedios superiores a 32 kilos de leche por vaca al día era una proeza ¿no ingeniero?, me preguntó tratando de forzar mis recuerdos.

Incluso, prosiguió Oscar, hasta hace pocos años atrás, el establo seguía alcanzando récords de productividad logrando sus vacas promedios que superaban largamente los 40 kilos de leche al día por vaca.

¿Recuerda Inge?, cuando hablábamos orgullosos cuando nuestras más de 300 vacas productoras producían en promedio más de 40 kilos de leche al día cada una de ellas ¿recuerda?

-Claro Oscar ¿cómo olvidarlo?

-Teníamos el mejor establo y las mejores vacas del Perú… ¿no ingeniero?

-Por supuesto Oscar, le afirmé.

-Todo eso Inge ya se perdió, afirmó Oscar

Los Recuerdos de un Establo Maravilloso

Las buenas vacas las vendieron, la dirección la entregaron a administradores que más saben de astrología cuántica que de ganadería y por supuesto ahora las vacas producen alrededor de 26 kilos de leche en promedio al día, un récord histórico de improductividad. Las vacas de nuestro establo nunca en su vida han producido promedios tan bajos. Una vergüenza.

-Y ¿cómo sobrevive el establo? ¿es magia, o un milagro?, le pregunté intrigado

-Recuerda usted Inge que a nosotros nos quitaron cerca de 10 céntimos de sol de nuestro precio de leche que recibíamos…. ahora se los dieron todo para aparentar una gestión exitosa…. Y a mí me botaron porque yo sabía de todo esto y a esta nueva administración le era peligroso tener personas que pudiesen desenmascarar la realidad del establo.

El Auge de la Producción de Leche en el Establo Vitor de Arequipa

Esta sorpresiva conversación con Oscar trajo a mi mente hermosos y nostálgicos recuerdos de aquella época en que tuve el honor de laborar en el gran establo Vitor de Arequipa hace ya más de 18 años y recordé que en ese entonces pude escribir un artículo que traslucía el inmenso orgullo que sentíamos, en ese entonces, por aquel extraordinario Establo Lechero. Aquel Artículo lo titulé “Un Establo de Excelencia” y lo transcribo a continuación, con pena y añoranza por lo que fue y por lo que hemos perdido:

Un Establo de Excelencia (2008)

Artículo escrito en enero del año 2008

Intente acertar la respuesta a esta pregunta:

¿En qué país se encuentra un establo que alcanza los siguientes índices productivos?

Este establo cuenta con 220 vacas en estado de producción de leche (vacas en estado de lactación).

El establo ha mantenido por más de un año, promedios superiores a los 30 Kg de leche al día por cada vaca (salvo lapsos de descoordinación, cambios en la organización del establo o épocas de escasez de forrajes de buena calidad)

Más del 40% de estas 220 vacas, producen un promedio superior a los 40 Kg. de leche al día

30 de estas vacas en producción, producen más de 50 Kg. de leche al día.

6 de ellas son las estrellas del establo, pues superan los 60 Kg. de leche al día.

Entre estas 220 vacas en estado productivo, también están consideradas 25 vacas que están acabando sus ciclos productivos. Estas 25 vacas producen como promedio 6 Kg. de leche al día. Si decidiésemos en estos momentos, dar por concluido los ciclos productivos de estas 25 vacas (cosa normal y racional, que cualquier establo lo hubiese hecho) …. La productividad de las 195 vacas restantes en estado productivo, alcanzarían un promedio de

¡!!!!!! 37.14 Kg. de leche al día por vaca ¡!!!!.

Vacas de Alta Genética sin Hormonas ni Tecnologías costosas

Cabe señalar, que este establo no utiliza hormonas en sus vacas, ni levaduras, ni maquinarias costosas como el mixer de racionamiento total, ni sistemas computarizados de última generación para control de la alimentación y ordeños.

A las vacas las alimentamos con los insumos que normalmente utiliza cualquier establo peruano de crianza intensiva, es decir, chala de maíz como forraje principal y un concentrado basado en maíz y soya.

Por último y aunque sea difícil de creer, las vacas más productoras solo consumen 14 kg de concentrado al día para lograr producciones superiores a los 60 kg diarios de leche.

Al leer estas características de este establo, usted se preguntará seguramente:

Un Establo Lecheros de clase mundial en el Perú

 “¿Y qué hay de raro de estos índices en un establo de USA? ¿Acaso no es normal que en los establos de USA o Israel, se alcancen sostenidamente promedios de 37 kg/vaca/día en los establos?”

Es cierto…… pero……. Y si le afirmara que…….   ¡Ese establo está aquí en nuestro país!

Luego de esta afirmación, probablemente, usted se preguntaría:

“¿Qué habrá comido este tipo que alucina la existencia de esas vacas y de un establo con estos índices productivos en nuestro país?”

………………..

Cómo comenzó el ambicioso Proyecto Vía Láctea

Recuerdo aquel día del año 2006 en el que una extraordinaria ejecutiva de GLORIA SA, me dijo por teléfono:

“César…………. los señores Rodríguez han aceptado que puedas replicar tus técnicas en el establo “Vitor” de GLORIA SA……. y llamaremos a esta experiencia…El Proyecto Vía Láctea………. ¿qué te parece?”

En esos momentos, una extraña mezcla de alegría y de un extremado temor recorrió mi mente. Pues la verdad, una cosa es trabajar con vacas, y otra muy diferente, trabajar con las mejores vacas.

Sin embargo, era consciente, que esta era la oportunidad que esperaba llegase algún día. Era algo así, como que si a un desconocido entrenador, de un también, desconocido equipo de futbol del medio, repentinamente, le diesen la oportunidad de dirigir al Barcelona con Ronaldinho y Messi incluidos ¿no?

 El lógico temor que me embargaba en esos momentos y que me ocasionó un escandaloso incremento de la frecuencia de micciones diarias, era proveniente a que no existiría ningún pretexto posible para fracasar en esta experiencia con esa calidad de vacas…. mejor dicho…. con las mejores vacas.

La Gran Oportunidad de manejar a las mejores vacas

Y es que el establo “Vitor”, es quizá, uno de los pocos establos en nuestro país que por décadas (cerca de 60 años), ha tenido siempre, el especial cuidado de desarrollar meticulosamente la genética de sus vacas.

Sin escatimar inversiones, siempre este establo, utilizó y utiliza para sus vacas, los mejores tipos de semen americanos de Alta Genética. Es por ello por lo que las vacas son muy cotizadas y apreciadas en todo el país, e incluso sus terneros (crías machos), pocas veces los venden para “carne” y casi en su totalidad, son vendidos a ganaderos para fines netamente reproductivos.

Estos mismos tipos de semen que generan a esas extraordinarias vacas, las ofrecen a todos los ganaderos del país, de tal forma, que al igual que lo ha hecho el establo “Vitor”, los ganaderos tienen la oportunidad de incorporar en sus vacas una genética de gran calidad, forjándose con esto, un horizonte productivo diferente.

El Gran Secreto: ¿Por qué Vacas genéticamente superiores no rendian al máximo?

A mediados del año 2006, cuando asumí —con honor, aunque sin merecerlo— la dirección del establo “Vitor”, me sorprendió notar algo que no tenía sentido a primera vista: a pesar de la extraordinaria calidad genética de sus vacas, estas no mostraban una alta productividad.

Lo más curioso era que esas vacas descendían de legendarios padrillos como “Luke” y “Bellwood”, por lo que uno esperaría lógicamente un rendimiento excepcional. Sin embargo, a pesar de que su alimentación cubría perfectamente los requerimientos energéticos y proteicos, la producción de leche no correspondía al potencial genético que llevaban en la sangre.

La Genética no lo es todo: Vacas de alta calidad con baja productividad.

Las vacas, en ese entonces e históricamente hasta esos momentos, solo alcanzaban a duras penas promedios superiores a 25 Kg. de leche por día. Nivel muy inferior, por cierto, a lo que se esperaría de unas vacas de primerísima calidad y de una extraordinaria genética.

Aunque inesperado, este hecho corroboró, de cierta forma, la teoría de que los pilares del desarrollo de la ganadería lechera no se limitaban únicamente a los dos elementos tradicionales que aparecen en los libros y que los profesionales repiten incansablemente (la genética y la alimentación de las vacas), sino que también incluía otros dos pilares adicionales que muchas veces se marginan injustamente en la enseñanza ganadera: los manejos positivos hacia las vacas y la organización del establo, fundamentales para llevar nuestros establos hacia la excelencia

Cómo un nuevo enfoque duplicó la Producción de Leche

En consecuencia, la atención de mis esfuerzos se centraron entonces, en estos dos últimos pilares mencionados; La aplicación de correctos manejos en las vacas (Racionamientos y ordeños frecuentes, pariciones diurnas, iluminación idónea, música en las vacas, combate al estrés, vitaminas directas, protocolos de ordeños, alimentación eficiente, sistemas de control a TR, etc.) y en establecer una organización férrea, basada en la capacitación al personal existente y a la necesaria inclusión en la estructura del establo de verdaderos profesionales con conocimientos y experiencia empresarial.

Don Jorge en la dirección general del proyecto, Ivonne en la supervisión general, el Ing. Ortiz en la asesoría técnica, Frank en la logística, Juan en la parte veterinaria y yo en la ejecución misma del proyecto, conformamos pienso, un sólida estructura técnica en la organización, capaz de lograr resultados positivos en cualquier proyecto.

Trabajar con tan extraordinarios profesionales, capaces y abnegados, facilitó, sin duda, el logro de las metas trazadas en ese entonces. La gran organización planteada en aquel entonces, felizmente, se ha mantenido sólida en el tiempo, tomando la posta de la dirección en su momento el Ing. Ortiz, y posteriormente, el Ing. Luna. Todos, profesionales de categoría que aseguraban y aseguran el bienestar del establo. Pues, como es lógico, grandes profesionales deben dirigir a estas extraordinarias vacas.

Un buen equipo, una innovadora técnica, grandes resultados

Los resultados de aquella aplicación no se dejaron esperar, y en tan solo 60 días, la productividad de las vacas superó los 31 kg/vaca/día, acompañando a este resultado, el incremento de otros índices importantes para el establo; como es el incremento de la calidad de la leche (mejores sólidos), mejores tasas de preñez en el establo, reducción de casos de mastitis, mejora de condición corporal de las vacas, etc.

Fuimos testigos entonces, en aquella inolvidable experiencia (el proyecto Vía Láctea), de cómo el potencial productivo contenido en la genética de estas extraordinarias vacas, comenzaban a salir a la luz.

Hoy con mucha alegría, y estoy seguro de que comparten este mismo sentimiento todos aquellos profesionales que participaron en aquella extraordinaria experiencia.

Ahora, después de casi dos años desde aquel inicio de la aplicación del “Proyecto Vía Láctea”, en el Establo “Vitor”, los cambios y manejos a las vacas aplicados en ese entonces, básicamente, se han mantenido en el tiempo y la organización, ha persistido en los controles y formas de dirigir impuestos en aquella experiencia.

Como lo pueden apreciar, esa combinación exitosa alcanzada en el Establo “Vitor”, conformada por; una extraordinaria genética, una buena alimentación, la aplicación de correctos manejos y una sólida organización en el establo, fue sin duda alguna, el camino seguro que nos llevó a acercarnos a la excelencia en el establo.

Así es, estimado señor. Aunque quizás le cueste creerlo, los índices productivos que presento al inicio de este artículo reflejan la realidad concreta de un establo peruano y de sus propias vacas lecheras.

……. El establo “Vitor” de Arequipa y sus extraordinarias vacas peruanas.

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